martes, 10 de febrero de 2009

Fase uno: Encontrando lo buscado

Domingo 8 de Febrero de 2009. El anuncio del diario rezaba en su sección Clasificados:
TELEMARKETER Jóvenes p/venta
telefónica 18-26a (excluy) c/s exp
Excel amb laboral Turnos de 6hs
Básico $809 + comis Pres: Lunes
c/CV 10-13 hs xxxx xxx xxx
Resulta no menos que atractivo un anuncio de este tipo. Es algo tan simple como 'dinero rápido', casi instantáneo. En éste, nuestro mundo plagado de lo instantáneo y globalizado, lo que queremos los jóvenes (acaso actores centrales de esta historia) es un sustento viable y rápido. Esta parecía la oportunidad perfecta.
Y aquí, en esta suerte de madrugada en lo que al texto respecta, es cuando planteo el primer interrogante: ¿Por qué una oferta de este estilo puede resultarnos interesante? Hay varios factores intervinientes. En el momento que vi el aviso, justamente me encontraba buscándo algo de este tipo. Uno encuentra lo que busca, podría decirse. Y yo, en pocas palabras, estaba sin empleo, necesitaba un ingreso más en mi casa, y además venía teniendo un sueldo durante medio año, simplemente estaba acostumbrado a tenerlo. Fue entonces que remarqué el anuncio en el diario.
Durante todo el último año mantuve mi cabeza ocupada en estudiar las relaciones sociales que marcaron la historia de la humanidad. Siempre hubo gente arriba y abajo. Históricamente. Incluso hoy; sociedades, países, continentes enteros se traducen en opresores y oprimidos (acaso dirían países centrales y países periféricos, en circulos neo-marxistas y no tanto). Era en esos momentos en los que preguntaba qué era lo que llevaba a una cabeza a no querer levantarse y rehusarse a ser explotado. Era algo que me preocupaba, era un asunto que me carcomía el cerebro... Hasta que medianamente fui dilucidando el interrogante.
Al tomar contacto con la realidad, se tiene la oportunidad de acercarse a grupos análogos a uno, y así poder comparar.
Con altibajos, siempre pertenecí a la clase media. Tuve la suerte de que aún así mis raíces maternas oriundas del humilde pueblo de Barranqueras, Chaco; pudieran hacerme ver que no todos corremos la misma suerte. Es así que de a poco pude informarme más para poder, desde algún lugar, luchar.
Y vi. Vi que son miles los adolescentes que no tienen tiempo. Es cuando ese hueco en el que el tiempo ausenta, lo ocupan las necesidades. Un joven de la clase media argentina, hijo de una generación que pude acercarle la oportunidad de estudiar, intenta de alguna forma organizar su vida para asistir a la facultad, trabajar por un salario y, el resto que queda, minimamente comer y dormir. Ahora bien, es aquí donde se plantea el problema. ¿Qué tipo de trabajo puede encajar en ese horario, y que al mismo tiempo deje un mínimo sustento que pueda adecuarse a las necesidades de un joven?
Tenía que ver por cuenta propia si era real la posibilidad que éste tipo de trabajo ofrecía. Me puse una camisa rigurosamente blanca, pantalón de vestir negro, borceguíes oficiando de zapatos, y me dirigí a las entrevistas que citaba el diario.
Luego de una mañana de explicar la razones de por qué era la persona adecuada pasa el puesto que estaban buscando, no restó más que esperar unas horas para que el empleado de RRHH me pidiera que fuera al día siguiente ya que había quedado seleccionado para una empresa de venta de productos.
Una crisis de tamaño bíblico se había formado en mi ser. Luego de un año entero de criticar este tipo de empleo, me encontraba a horas de ir a una capacitación de uno. "Pero a no temer", pensé en un momento. Esto me presentó dos oportunidades: La primera era poder ir entendiendo qué es lo que nos lleva a tomar estos difamados trabajos. Pude distinguir varias razones, como por ejemplo el exitismo con el que fuimos criados. El inconsciente colectivo, inexplicablemente mira con mejores ojos al joven que dice, aún con ojos cansados y mirada perdida, "Soy telemarketer", que al chico que vende diarios en la esquina. Triste pero real.
Es más que común también que los padres se sienten seguros y hasta orgullosos cuando saben que su hijo trabaja en una multinacional de telecomunicaciones. ¿Cómo no estarlo? Si ellos son el motor y pilar fundamental del mundo globalizado. Esto se llama presión colectiva, y está empujada pricnipalmente por nuestras familias. ¿Qué pasa? Ellos no saben (o no quieren saber) que esas renombradas y generosas empresas no son más que conglomeradas de pequeñas empresas subcontratadas que pueden estar alquilando un departamente en Almagro, conectando un par de líneas y poniendo a trabajar ahí a un par de pibes. Y ahí tenemos la gran compañía de Teleperformance (de renombre internacional).
Pero no nos desviemos. La segunda oportunidad que se me presentaba era, justamente, la de contarles a ustedes cómo es ésto desde adentro, y que ustedes puedan compartir su propia experiencia, ya que hay varias clases de empleos relativos a la Teleperformance. Poder criticarlo con fundamento, hacer un análisis medianamente profundo de cómo y por qué funciona y sigue funcionando, y si seguirá haciéndolo por mucho tiempo.
Todavía no se si efectivamente voy a tomar el trabajo. Son tres días de capacitación. Luego de eso hay un pequeño examen y recién en ese momento dicen si podés seguir o no. En el caso que quede... Veré. Por lo pronto les comento cómo funciona todo en la etapa inicial, y qué es lo que hacen tan bien como para, a pesar de no respetar las conquistas logradas por los trabajadores hace tantos años, sigan en vigencia (y en crecimiento) desde hace casi una década.
Hoy tuve el primer día de capacitación, pero por falta de espacio quedará para la próxima. Hasta entonces.
I

2 comentarios:

  1. Se le puede sacar mucho jugo a la experiencia, estudio comunicacion social, le dejo un mail activando.callcenter@gmail.com
    Estamos comenzando a organizarnos entre distintos call, espero nos podamos ver en algun momento. Saludos y felicitaciones por su nuevo trabajo... lo doy por aceptado porque no vas a encontrar mucho en marzo, incluso te deseo suerte para que pases los 3 meses.

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  2. por lo general es un trabajo que no requiere experiencia y si te rompes el alma es bien pago, por eso suele tener exito.

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